Síntesis del Seminario-taller: Historias de vida y relación con la(s) violencia(s)

 

31-8 y 1-9 de 2024 

Seminario-taller: Historias de vida y relación con la(s) violencia(s)  Contexto 

Asistimos en todos los rincones del planeta a procesos de polarización donde la  violencia se vuelve denominador común de los vínculos interpersonales y de las  relaciones entre países, regiones o religiones. Como todos los procesos sociales, estos  cambios impactan en la construcción de nuestro cotidiano y de nuestros vínculos. Nos  vemos llevados a reformular posiciones, a cuestionar nuestras identificaciones, a  situarnos como sujetos en escenarios que cada vez aceptan menos grises.  

Al mismo tiempo, somos conscientes de que nuestro accionar como sujetos influye en  el devenir de este mundo, y esa situación puede confrontarnos con sentimientos de  culpa, impotencia, bronca o vergüenza.  

En este contexto que tensiona los paradigmas conocidos, que cuestiona bases éticas y  de convivencia que se suponían ya adquiridas, creemos firmemente en el interés de  aportar una mirada socioclínica, una escucha profunda y herramientas artísticas para  co-construir pensamiento y acción alternativos.  

 

Objetivo(s) 

A través de un trabajo de historización individual, tomar contacto con la incidencia de  la(s) violencia(s) en nuestra trayectoria.  

Entrar en resonancia y diálogo con el grupo para co-construir hipótesis, identificar los  distintos tipos de violencia y las reacciones que estas pueden generar, como también  los recursos que cada uno activó en esas situaciones.  

Integrar la dimensión física y la simbolización a través de ejercicios teatrales que ponen  en acción cuerpos y objetos.  

Llegar a la creación de una pieza artística conjunta emergente del trabajo anterior  (reflexión, emociones, cuerpo) que pueda ser eventualmente compartida al exterior del  taller y que, en todos los casos, permita visualizar herramientas para romper con la  sensación de aislamiento e impotencia frente a la(s) violencia(s).  

 

Síntesis  

Las múltiples formas de la violencia 

Surgen de los relatos de vida numerosos tipos de violencia, que ejemplificamos  a continuación.  

VIOLENCIA VERBAL: discriminación, insultos, gritos.  

VIOLENCIA FÍSICA: golpes, chancleta, cinturón.  

VIOLENCIA RACIAL: los negros, los judíos 

VIOLENCIA PSICOLÓGICA: desvalorizar, socavar la autoestima, mostrar  desinterés o abandonar…poner a niñxs en roles de adultos o mediadores,  exponer a personas a órdenes paradójicas que no pueden resolverse… y  algunas pequeñas violencias cotidianas como corregir lo que el otro hace dando  a entender que no lo hace bien…

VIOLENCIA POLÍTICA: persecuciones, cárcel, fascismo, suicidios forzados,  desaparición de personas 

VIOLENCIA “HISTÓRICA”: Malvinas, Segunda Guerra Mundial VIOLENCIA DE GÉNERO y SEXUAL: abusos, parejas violentas,  (masculinidades) 

VIOLENCIA ECONÓMICA: dominación a través del dinero, la pobreza en sí  misma como violencia, discriminación por clase socioeconómica, violencia que  nace por falta de espacio vital para convivir 

VIOLENCIA LABORAL: maltrato, presión, cursos de formación con métodos  agresivos, inestabilidad laboral, incertidumbre.  

VIOLECIA EDUCATIVA: presión, selección, exigencia… 

VIOLENCIA DEL LENGUAJE (más allá de la violencia verbal explícita, nos  referimos acá a la manipulación efectuada a través del lenguaje): la mentira, el  eufemismo, el lenguaje del management que no permite expresar emociones o  no nombra lo que es por su verdadero nombre….y la distorsión de la palabra en  todos los ámbitos (medios de comunicación, política o en la familia)… cuando el  lenguaje sirve para ocultar otras violencias 

VIOLENCIA DEL SILENCIO: los secretos, los que no hablan,  VIOLENCIA MÉDICA: procedimientos agresivos 

VIOLENCIA en el campo “PSI”: personas que analizan a otras fuera de un marco  terapéutico, terapeutas que rompen el marco terapéutico. 

VIOLENCIA “EXISTENCIAL”: la violencia de nacer, la violencia de algunas  muertes inesperadas.  

Tomando ejes transversales:  

…varias de estas categorías que nombramos a nuestra manera en el grupo, las  más invisibles, las que tienden a reproducir el sistema y su organización de  poder, quedarían también incluidas en la categoría que propuso Pierre Bourdieu  como VIOLENCIA SIMBÓLICA (por ej, la discriminación por clase social en el  ámbito escolar o laboral, la violencia de género cuando se hace invisible, todas  las violencias que hasta cierto momento parecen “normales” y se instalan en las  relaciones sociales).  

…algunas de estas categorías pueden integrar la VIOLENCIA INSTITUCIONAL,  como la educativa, la hospitalaria, pero también la administrativa (inmigrantes,  trámites varios, etc.) 

….otras, por el ámbito en el que se practican, pueden ser llamadas  INTRAFAMILIAR (género, sexual, psicológica o física).  

Algunos de los recursos que mencionamos a lo largo del taller para  hacer frente a esas violencias 

* Disciplinarse, amoldarse 

* Recluirse en lo doméstico (domesticarse?) 

* Encontrar un punto de apoyo externo, una “excusa” (el perro, la hermana, etc.)  para salir de una situación insostenible. 

* Centrarse en los estudios para encontrar vías de salida a un ámbito familiar  violento. 

* Utilizar el poder de la palabra y de la ley para combatir la violencia (abogacía,  leyes, pero también “decir” lo que está pasando, nombrar lo que no se nombra) * Irse, escapar.  

* Irse (si la batalla está perdida) pero para seguir resistiendo en otros lados, en  otras formas o espacios sociales. 

* Buscar aumentar la fuerza de lo colectivo 

* Buscar refugio o evasión en las mascotas y en el mundo animal o la naturaleza * Acercarse a lo artístico 

* Apoyarse en la red de amigos, la solidaridad 

* Mantener el humor como herramienta de puesta a distancia, de protección,  para poder enunciar lo que duele demasiado 

* Desconectarse de las informaciones de los medios, insensibilizarse.  * Trabajar el autocontrol para no responder a la violencia con violencia * Conocer las formas de violencia para descubrir las violencias invisibles 

Algunas observaciones de la primera jornada 

Se habló mucho del “miedo” y muy poco del “enojo” o la “impotencia” Apareció con fuerza el miedo a la repetición (No quiero repetir lo que hicieron  conmigo) y la voluntad de cortar la transmisión de prácticas de violencia  heredadas o padecidas.  

Hablamos de la imbricación de los determinismos y lo difícil que es saber hasta  dónde estamos determinados (por lo social, lo familiar, lo inconsciente) y cuándo  podemos ser sujetos de nuestra propia vida. 

Hablamos mucho de la elaboración que sigue a las violencias y los matices (a  reflexionar) entre “perdonar”, “justificar”, “entender”, “entender con las tripas”….  al perpetrador.  

También se subrayaron los matices entre Fuerza (positiva, para frenar la  violencia), Violencia (causa daño) y Agresividad (natural).  

Mencionamos los efectos que tiene la violencia: síntomas (vómitos, malestar,  etc.), enfermedades… hasta la muerte.  

Desde el registro corporal y teatral 

El ejercicio de la OLA y el ALGA nos llevó a percibir y observar nuestra reacción  ante la violencia, sentir cómo la violencia engendra violencia “hasta que ya no  sabemos qué estamos haciendo pero lo seguimos haciendo”.  

Notamos que la perspectiva de paz nos genera un alivio real.  

Los patrones corporales ligados a la violencia mostraban incomunicación entre  las dos personas, ritmos disonantes y movimientos cortados.  Los patrones ligados a la paz eran armónicos, muchas veces sincronizados entre  las dos personas y mostraban un reconocimiento del otro y de su accionar. 

En ambos casos aparecía mucho la tendencia a imitar, una suerte de “contagio”  de una u otra cosa. La influencia del entorno por mimesis.  

El ejercicio Noticiero emocional puso en tensión dos imágenes de la  Argentina.  

Por un lado, una “tierra de paz”, aquella promesa para los inmigrantes, un país  de intensidad positiva, energía viva, gente solidaria, afectividad y una sociedad  históricamente movilizada en lo político. UN PAÍS QUE DA ORGULLO 

Por otro lado, un país colonizado, con una población adormecida, shockeada y  gobernado por mafias, cuya única esperanza es una salvación/ un milagro EL  LADO NEGATIVO 

Encontramos cierta dificultad para “conectar” con las noticias elegidas y  proponemos la hipótesis de que nos resulta difícil compartir en sociedad la  angustia y la bronca, quizás por miedo a caernos todos o a angustiar a otros. El  humor, la ironía y cierto grado de sobreactuación (hago como si…) fueron las  salidas que aparecieron para resolver el ejercicio, que nos enfrentaba muy  directamente con la actualidad.  

El ejercicio de los bastones nos permitió observar a los demás y observarnos  ante un objeto muy simbólico del poder y de la violencia.  

En la primera etapa individual, cada uno lo resignificó a su manera: arma, palo  de amasar, carga sobre los hombros, remo, guitarra, bastón, etc. y lo integró a la  expresión de una frase elegida.  

En la segunda etapa se vivieron, con un mismo elemento, encuentros diferentes:  enfrentamientos, amenazas o búsqueda de afinidad y encuentro. A pesar de ser  un objeto rígido que se resiste a amoldarse hubo relacionamientos que llegaron  a sincronizar danzas y entrelazados armoniosos. Otros mostraban posiciones  defensivas (en cruz) o amenazas de ataque directo (arma de fuego).  

En la tercera etapa atravesamos posibles relaciones de comunidad y liderazgo.  Por cuestiones de tiempo, no llegamos a rotar todos los líderes como estaba  previsto, pero resultó fructífero para ver la multiplicidad de opciones que se  desplegaban, no solo sobre “cómo liderar a un grupo” sino también sobre “cómo  seguir a un líder”. Hablamos de la responsabilidad y el peso que recaía en  algunos en el momento de dirigir. Del miedo de otros a quedar aplastados por  sus compañeros o ser lastimados en la multitud. De la incertidumbre y las  infinitas interpretaciones que generó la ausencia de líder tradicional, etc.  

No solo vimos un abanico de modos de liderazgo, sino que se hizo muy patente  la subjetividad que cada uno tiene en la lectura de las situaciones y las razones  por las que adopta tal o cual comportamiento en una situación dada. Sin la  instancia de intercambio posterior, todos hubiéramos ignorado ese entramado de  pensamientos que subyace a la acción de cada individuo en un grupo (no solo a 

escala nacional, sino también en relaciones jerárquicas de trabajo o de  cooperación).  

El ejercicio de garabatos automáticos puso a prueba ese mismo trabajo en  equipo con la consigna de compartir visiones muy subjetivas y lograr consenso  para elaborar una narración.  

La puesta en escena del story board nos mostró 3 escenas convergentes en  cuanto a que eligieron una narrativa vinculada a la violencia política e histórica,  y muy centradas en la violencia de la última dictadura.  

Ninguna se abocó a contar una historia de registro individual o familiar, cuando  la consigna no decía nada al respecto. No tuvimos tiempo de hacer hipótesis  grupales al respecto. Contrariamente a lo que sucedió en el noticiero emocional,  acá hubo una fuerte conexión con los años oscuros del pasado reciente (¿quizás  porque la actualidad viene a reactualizar ese miedo?).  

Reaparecieron elementos de evasión y esperanza que habíamos visto en el  noticiero: la naturaleza, el espacio exterior (Ovnis)… y los lazos de amistad  (abrazos) y la música (>Charly) como vías de cohesión.  

Los tres títulos de las obras “Miedo”, “Impotencia” y “Acción” se entremezclaron  en las narrativas escénicas, hasta el punto de que las tres obras realizadas en  simultáneo hubieran podido constituir una única obra que expresaba con mucha  potencia, a veces con humor o ironía, las heridas del terror político y una firme  decisión a permanecer aquí, donde “hay grietas en todas partes”, pero las grietas  también son posibilidad de salida (como los barrotes representados por los palos,  que mostraban su inestabilidad). En esa misma reversión de significados, el 

“miedo” mostró no solo su aspecto paralizante, sino también su efecto de motor  para la acción.  

Hubo también una convergencia del grupo en cuanto a las frases elegidas para  la escenificación. No solo la de las grietas ya mencionada, sino también  “Comunicado N°1” (¿traumática?), “Yo no voy a hacer lo que hicieron conmigo” (no estoy segura) y “Es tan intensa la vida acá” (muy polisémica y reflejando la  contradicción profunda que aparecía entre las dos imágenes de país a través del  Noticiero). “Intensa” porque hace sufrir, porque hay dolor y miedo y violencia,  porque hay abrazos intensos y alegrías, porque se elige y se padece al mismo  tiempo. Todas intencionalidades que quedaron reflejadas en el coro politonal que  cerró la tercera presentación.  

Algunas referencias bibliográficas o cinematográficas que mencionamos o nos  hubiera gustado mencionar 

Las películas Banshees of inisherin (o Los espíritus de la isla) y Tres anuncios  por un crimen, de Martin Mac Donagh (Irlanda), sobre lo difícil que es frenar una  espiral de violencia.  

La película La Ola, de Dennis Gansel, sobre el tema de la reproducción de la  violencia hacia el totalitarismo.  

Discurso sobre la servidumbre voluntaria, de La Boétie. 

La violencia y lo sagrado, de René Girard.  

La sabiduría de las emociones, de Norberto Levy, psicólogo gestáltico.  La neurosis de clase, de Vincent de Gaulejac, sociología clínica (tengo  ejemplares que puedo regalar si a alguien le interesa leerlo).  

Hay muchos libros de sociología clínica sobre el tema de la violencia en el ámbito  laboral pero suelen estar en francés. El coste de la excelencia es uno que se  tradujo hace mucho. Igual si algo de eso les interesa quizás podamos ubicar  artículos en español también. Avisen… 

Gracias a todos y todas por participar, por compartir, por reflexionar y co-construir  pensamiento colectivo y comprensión de cada uno. Gracias por la creatividad y  las risas. Seguimos.  

Josette y Marcela 

Podés descargar el archivo de la sintesis del seminario:
versión en español